Se cree que Sir Isaac Newton estaba sentado bajo un árbol cuando una manzana le cayó en la cabeza. Entonces ideó su ley de la gravedad. Sin embargo, es más probable que se haya inspirado en un par de tetas pesadas que se balanceaban y le golpeaban en la cara. Erin Star recrea ese momento que cambió el mundo usando un árbol para hacer que sus pesados pechos se balanceen como péndulos.